Thursday, October 20, 2011


Qué  deseos de volver a esos ritos de poros abiertos y marañas en la frente. De labios hinchados por los hombres de todos los países, de todos los rincones. Por aquellos con las manías más extrañas... lamerme la cara, limarme las uñas, tocarme con amor el cuerpo tendido en esa playa famosa.

Intento hoy retomar el camino ajeno a lo que se ternó cotidiano. Procuro hoy trazar la línea paralela que de la mano me pasee por enfrente de la acera.  El ‘’preciso instante’’ toca a mi puerta. El recelo me atrapa las piernas, me cubre la boca con un paño amarillo y sólo me deja libre el pensamiento.

Es un transe lo que me arrebató de la mesa en este momento. Siento los ojos pesados… es arena que sumerge mis párpados. Tengo en la boca del estómago una flor de dulce aroma, de bella forma, colorida y uniforme. Están en mi mente el viento y tu cabello, que juntos me refrescan la mirada en mis recuerdos. Estoy cabalgando hacia el más sutil de los abismos…el que tiene paja y plumas para amortiguar mi caída. Tus palabras han tejido una misteriosa hamaca, y me pienso día noche meciéndome en sus cuerdas.

Cuando cierro los ojos es como si tu boca me diera de beber. Bebo cada gota y mi cuerpo se torna la puerta al paraíso. Los arbustos se mueven, las aves se pavonean. Las nubes y las gotas de lluvia iluminan mi cara y agrandan las pecas que hay en ella.

Te he visto venir, llegar y quedarte a mi costado. Me he visto sujetada de tu brazo, de la tela más fina de tu atavío.

Wednesday, August 24, 2011

Explotar-Explorar


Después de que la mente se abre ante lo inminente, ante lo que no sostiene más disimulos, las verdades se tornan puntas afiladas que tallan desdicha, desesperanza. El pecho inflamado, borboteando latidos sin ritmo; la lengua torcida, encogida y provocando sólo alaridos. Las manos tornándose paños de limpia blancura que se oscurecen con cada pujido. El vientre estrecho, recibiendo el ardor del espacio vacío. Los ojos abiertos, drenando. Inundando los callejones del desamparo. Trazan ellos un camino y se anticipan, marcando un río que desemboca siempre en la claridad del día.

Río


En la calzada juré ver tus pasos encimándose a los míos.

Tus manos deteniendo mi cabello del viento,

tu risa opacando el ruido del torrente que no descansa.


¿Cómo me olvido de que existes, si tu calor me curó el alma?

Me dibujó una sonrisa color violeta y pintó mi cuerpo con piedritas de riachuelo.

Bordó en mis hombros y en mi cuello, la esperanza de cantar en tu dialecto.


Hoy, cuando te pienso se me ensancha el alma…

se me llenan de dulzor la boca y las palabras.

No consigo nada más que imaginarme trepando mil aviones y corriendo a mi refugio,

el que tanto me elogió aquella noche en tus brazos.


Ahora que te llamo y me atiendes; que me llamas y sonrío,

debo decir que volví revivida.

Ni las horas ni las escalas han desprendido de mi mente el temblor de tu carcajada.


Mi querida fuente de festejo y asombro,

tornaste mi paseo en una expedición furtiva

con el único propósito de sonreírle a la vida el día entero.

Cambiaste la dirección de mi destino y ahora apunta inevitable al sur del continente.

...


Dos inviernos bastan para saber de sobra que este no es ni será jamás el año de la normalidad. Han caído y he comido ya muchos frutos para lo que va del ciclo. Y no puedo más que esperar, abrir los brazos, las piernas, y dejar que el mundo me inunde con su gente y sus palabras...

Hoy estoy con los pies descalzos y el alma pariendo sentimientos.

Tuesday, December 28, 2010

.:El cielo ya no es cielo:.

Los dos, como párvulos dormimos después de comer.

Rodeados de dos no menos enormes colmillos,

cansados y arqueados encontramos puntos en común.

El cielo ya no es cielo.

Estamos intactos. Saciados mientras nos vemos y recordamos el techo que hemos

dejado tan doblado por los azotes de mi risa contra la tuya...